I. Residencia NAVE

Fuego de Oro

II. Posvida

El proceso de investigación/creación de Ninacuri iniciado en Nave continuó a lo largo del tiempo y sigue vigente hasta el día de hoy. En diciembre de 2018 expuse sobre el proceso de investigación en una charla organizada por la Compañía nacional de danza del Ecuador. Después, en enero de 2019 viajé a La Paz para tomar clases con Silvia Rivera Cusicanqui, allí hice una especie de residencia en sociología durante un mes, en el que profundicé en la investigación para la pieza.

Al volver a Quito, me invitaron a escribir un artículo en la revista POSTS acerca de mis experiencias como artista residente, es así como hice un recuento de mi investigación/creación en torno a la identidad, cuya actividad más reciente incluye a esta pieza, Ninacuri (ver enlace al artículo). Allí decidí que era hora de entregarme al cuerpo e inicié una residencia artística en Balao–creación en residencia, en Quito. El proceso de dar el salto de la teoría a la práctica fue complejo, tuve el acompañamiento de Carolina Váscones y con ayuda de su mirada pude consolidar una primera versión de la dramaturgia corporal. Además, diseñé y construí un objeto escénico y por último diseñé y encargué la elaboración del vestuario.

A continuación, viajé a Barcelona a realizar una residencia artística de tres semanas en Graner en el marco del encuentro Africa Moment. Allí compartí el tiempo/espacio de residencia con Nemecio Berrío Guerrero. Fue muy fructífero intercambiar y contar con la mirada constante de otro. Además, conté con el acompañamiento artístico de Aida Colmenero Díaz, quien me ayudó a concretar la dramaturgia corporal final. Como cierre de residencia presenté una primera versión del solo de danza, aún sin banda sonora. Quedé bastante contenta, aunque con algunas preguntas acerca de la configuración del dispositivo escénico.

Al regresar a Ecuador tenía planeado realizar una última residencia en Balao para terminar de armar la pieza, modificar el dispositivo escénico de presentación para tener a las personas más cerca y encargar la banda sonora y estrenar. En eso llegó la pandemia y dejó suspendido el proceso por varios meses.

A inicios de julio de este año (2021) inicié una nueva residencia artística en mi residencia, la cual incluye encuentros semanales con otras tres artistas que también se encuentran creando solos de danza para acompañarnos e intercambiar sobre nuestros procesos

Me ha llevado mucho más tiempo del que imaginé retomar la danza de Ninacuri. Con todo el recorrido realizado y la cantidad de información generada, estoy indagando sobre los dispositivos que requiere esta obra más allá de la escena. Y con la crisis general que nos dejó la pandemia estoy buscando estrategias para lidiar con lo presencial y lo virtual.

III. Colaboración al Archivo

• Aporte de 15 fotografías de su proceso en NAVE. Créditos de la artista.
• Aporto de 2 fotografías de su charla en 2018.
• Artículo de la artista: aquí.